"Tuve la suerte de vivir una escuela eterna: la naturaleza"
Félix Rodríguez de la Fuente
Era tal, la angustia de la noticia de su muerte, que compré todas las revistas tratando de dar con alguna que la desmintiera.
Todas, me decían lo mismo...
Hasta siempre, Félix, Teodoro y Alberto.
Genial Javier. Sencilla y emotiva entrada. No se puede decir más...
ResponderEliminarSaludos.
Te entiendo perfectamente, Javier.
ResponderEliminarUna vez asumida su pérdida, tres amigos nos juntamos para reunir todos los períodicos y revistas que pudimos dando noticia de su vida y su muerte. Fotocopiamos todos los recortes de prensa y los encuadernamos lo más lujosamente que nos alcanzó el bolsillo. Sabíamos que Félix era ya parte de la historia, como lo sigue siendo de la nuestra.
Saludos.
En fin, nada que comentar, vengo del blog de Javier Barbadillo y me encuentro con otro precioso homenaje.
ResponderEliminarCasi que me da pena no haber sido un poquito más mayor para poder haberme dado cuenta realmente de lo que era este hombre. Pero me recuerdo perfectamente viendo en casa los capítulos de la serie El Hombre y la Tierra, hace tantos años ya...Ese recuerdo sí que jamás se me ha ido de la mente.
Un abrazo Javier y gracias por el último comentario que me enviaste.
Grandes personas!
ResponderEliminargrandes cambios que llevaron a cabo!
Se merecen un gran homenaje.
Uno nunca se cansa de ver tan archiconocidos documentales, que nos han enseñado tanto y sobretodo a respetar nuestra naturaleza.
-Si Anzaga, entre todos guardamos interiormente el “mensaje del respeto a la vida”, y todos los años sentimos la necesidad de exponerlo. Félix, nos unió más.
ResponderEliminarSaludos.
-La noticia Javier, me dejó noqueado. No entiendo, cómo podía esperar con tanta pesadumbre la rectificación de esa nefasta noticia que no terminaba de asimilar.
Diez años después, cuando cayó en mis manos tu emotiva carta-artículo en Quercus, se me fue ese marcado sentimiento introvertido, pasando a reconocer entre los amigos la gran tristeza que me acompañó tras la muerte de aquel ser increíble: Félix Rodríguez de la Fuente.
Saludos.
-Bueno Mamen, ni tú, ni yo, le conocimos en persona, pero dejó en nosotros esa perspectiva de amor por la naturaleza a su manera, seguramente, para que todos la interpretáramos a nuestro modo con el mismo fin.
Desde luego, no entiendo cómo a la gente se le llena la boca de amor y respeto, arrastrando un reguero de sangre a modo de ignorancia e incongruencia.
Saludos.
-Pues nada Juan, en ti, tengo puestas las esperanzas de futuro para que cuando apruebes la carrera de biología, sigas metiendo caña, y nos presentes nuevos capítulos filmados de la; a estrenar, fauna ibérica.
Suerte y saludos.
Un homenaje precioso Javier, sencillo y emotivo, como fue la vida de Feliz. Gracias a mi padre y a Felix, aprendí a respetar y amar a la naturaleza, a su flora y a su fauna, a comprender el equilibrio que debe existir porque todos formamos parte de ella.
ResponderEliminarPrecioso también recordar a los otros miembros del equipo que también dejaron su vida con Felix.
Gracias, por tu comentario en mi blog, y mil perdones, por no responder allí.
Un fuerte abrazo Javier.
A Salto De Mata
Gracias Miguel. No nos podemos olvidar de dos grandísimos compañeros y miembros clave del equipo. Teodoro y Alberto, tenían, según decían sus compañeros, gran devoción por su trabajo. Lo vivían y disfrutaban intensamente. Personalmente, siempre me acuerdo de ellos como una parte imprescindible del equipo de Félix.
ResponderEliminarQue conste Miguel, que ya firmé el manifiesto para puedas tener la libertad de no responder a los comentaristas de tu blog, siempre que, no te pregunten algo directamente.
Es normal; eres un fiera del diálogo.
Saludos.
Es curioso que muchas veces le habíamos visto en situaciones peligrosas, pero cuando su final llegó no lo podíamos creer.
ResponderEliminarHasta en eso coincidimos muchos de sus seguidores
La escapada al Cerro Autana, fue una de ellas. Según contaba Félix en su cinta y disco: "La aventura de la vida", en el capitulo de La Montaña Sagrada, tuvo que ser una fiesta iluminada de aparato eléctrico el desatado sobre esa tenebrosa cima.
ResponderEliminarVaya ganas, y coraje para una excursión.
Saludos.
Yo sólo recuerdo la canción infantil de "Amigo Félix", era también muy pequeña cuando se fue. Me imagino el vacío que dejó entre sus seguidores. Un gran hombre. Por suerte su presencia todavía se siente.
ResponderEliminarEs verdad Asterina. Qué canción más horrenda por cierto.
ResponderEliminarSeguro que tú, después de escuchar a Félix, comprendiste el porqué, sus seguidores, nos quedamos prendados con su voz y su mensaje.
Saludos.
Ja,ja,ja..pero yo tengo el disco!
ResponderEliminarOs entiendo perfectamente y en el fondo me pasa como a Mamen, aunque también amamos a la naturaleza me hubiera encantado crecer con la generación de Félix.
Creo Asterina, que después de la canción, Ana, quiso permanecer en el anonimato, y ni siquiera ofrecer ninguna entrevista. Desapareció.
ResponderEliminarCon el disco, tienes una auténtica reliquia del coleccionismo.
Por cierto; ¿Has pasado por Pelegrina (Guadalajara), donde se rodó gran parte de la serie de Félix? Si no has estado; pásate, te gustará.
Saludos.
Comparto sentimientos de aquel acontecimiento que fue duro de asimilar pero, que forma parte de esa trama de la vida que tanto nos inculcó Félix.
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