lunes, 2 de mayo de 2022

Días laboriosos para las grajillas

 
No siempre resulta fácil para la grajilla Corvus monedula acarrear leña en vuelo y culminar el viaje con éxito. Como se aprecia en la imagen, la incómoda rama leñosa portada con el pico está a punto de llegar a su destino.


Todo es espectáculo en el panorama calizo tan extenso a lo largo del curso del río Mesa. Largos precipicios rocosos repletos de oquedades para albergar a las aves rupícolas, comienzan a ocuparse.

Uno se pierde tratando de seguir las evoluciones de todas las aves y, has de ceñirte a las elegidas para concretar el plan. En este caso, me centro en las grajillas al estar preparando sus nidos para criar. Alborotadas están también las palomas bravías y zuritas, los aviones roqueros y comunes, vencejos reales y comunes, chovas piquirrojas, gorrión chillón, colirrojo tizón, roquero solitario, buitre leonado, alimoche, águila de Bonelli, halcón peregrino, etc. Todos, atareados en sus distintas funciones vigentes.

No les resulta nada fácil a las grajillas acarrear la leña para el nido, sobre todo, las ramas más gruesas para asentar la base del nido. Topan con aviones comunes, roqueros y vencejos reales que entorpecen con sus ataques preventivos las apuradas rutas de los córvidos. Hay un notable encontronazo entre grajilla y vencejo real al tener sus respectivas ubicaciones una tan cerca de la otra.

Como no puede ser de otra manera, el desorden caótico en las rutas aéreas alrededor del enorme cortado calizo es sólo aparente y, cada una de las aves dentro del complejo mundo volador, tiene su singladura asegurada gracias a la maniobrabilidad de todas ellas en conjunto. No sólo impacta el enjambre de aves en sus vuelos cotidianos, además, el tumulto sonoro es asombroso, dando a la escena una dimensión espectacular promovida por la explosión primaveral.


Grajilla Corvus monedula a la entrada de su nido.

Otra de las tareas del emparejamiento nupcial consiste en cortejar a la futura madre de los pollos con delicadas cebas. 




Vencejo real Tachymarptis melba.

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La grajilla con material para el nido suele posarse cerca de la ubicación, recelando, para más tarde, introducirse con seguridad.

 

Los vencejos reales, prospectan veloces buscando las fisuras adecuadas para anidar. Ello genera también disputas entre rivales por el mismo fin.


No parece ser bien recibida la grajilla como una buena vecina a juzgar por el firme marcaje del vencejo real.


Águila de Bonelli Aquila fasciata en pareja dentro de su territorio de cría. Las palomas y los córvidos están entre sus presas más habituales.

Buitre leonado Gyps fulvus.

Avión roquero Ptyonoprogne rupestris, otra de las especies abundantes en los escarpes calizos.

11 comentarios:

  1. ¡Vaya colección de aves! Imagino que no tendrás ojos suficientes para ver las evoluciones de todas. Un abrazo.

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    1. Es una locura esta línea de cortados en primavera con todas las aves yendo y viniendo con sus quehaceres cotidianos. Uno se sienta a observar y, que pase el tiempo.
      Un abrazo.

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  2. Es normal que cuando hay tanta competencia por buscar un buen lugar para hacer el nido y para encontrar materiales, para el mismo, las disputas entre esas aves, estén a la orden del día. Los córvidos, son de los más acosadores para otras aves, por lo que , seguramente, se saldrán con la suya; eso sí,las grajillas siempre tendrán que estar atentas a esas águilas que habitan en su territorio.
    Bonitas y testimoniales fotos de lo que cuentas.
    Saludos

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    1. Toda la competencia y el duro apogeo de las aves rupícolas en este enorme roquedo calizo es un totum revolutum de frenética actividad. Esa sensación que aportan de desorden, se complementa con el ensordecedor bullicio que provocan durante sus travesías aéreas esquivándose en los trayectos.
      Uno se puede pegar un buen rato admirando esa cascada de diferentes especies de aves cayendo desde los riscos, en el caso de los vencejos reales, a velocidades meteóricas. Un espectáculo para no perderse.
      Saludos.

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  3. El tiempo se pasa muy rápido viéndolos ir y venir, a mí me encanta verlos. Gracias y besos.

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  4. Uma explosão de vida! Um tempo maravilhoso de observação e entretenimento… belos registros!
    Um beijo

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    1. Así es, toda una explosión de vida. Ahora estoy trabajando en una finca de campo y el canto de los ruiseñores es ensordecedor. Qué potencia de voz, un canto maravilloso. Menuda banda sonora.
      Besos...

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  5. Fantástico reportaje, la foto de la grajilla con los vencejos reales detrás es extraordinaria. Un abrazo desde Castro!!!

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    1. Es un hormiguero de aves en vuelo. Increíble esa atención para dirigirse al cortado sin chocar con otras aves que, además, vuelan a toda pastilla.
      Otro abrazo Germán.

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  6. Hola Javier.

    Mover esas ramas, sortear al resto de aves y hacer el nido, tiene que ser estresante para las grajillas pero un deleite, para el que las observa.

    Un saludo

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