Destacado sobre el
raso horizonte, el aguilucho lagunero, parece dibujar el contorno del carrizo al
recortarlo con su vaivén aéreo. Como el resto de rapaces del género Circus, sus
vuelos son rasantes y las alas en forma de “V” les hacen inconfundibles. Sube y
baja suavemente, prospectando la laguna -su
hábitat típico- de un lado a otro a una velocidad ralentizada de unos treinta Km/h.
registrando minuciosamente el terreno bajo sus alas; contra el viento puede rebajarlos
a 15 Km/h.
A veces, saliendo súbitamente de la línea del carrizal, asusta y ahuyenta a las aves que navegan
tranquilamente. Cuando atisban una presa descuidada, la lentitud del planeo se
transforma en un picado súbito desde muy baja altura para calar sobre ella. Su
alimentación incluye huevos y pollos de aves acuáticas y ejemplares en periodo
de muda o sorprendidos mientras incuban en el nido. Captura además gazapos,
roedores, reptiles, ranas, peces e insectos. La visita a comederos artificiales
o granjas de todo tipo de animales es una fuente importante de alimento, más habitual de lo que parece en esta mediana rapaz. Como los milanos negros, visita también las carreteras
en busca de animales atropellados; he visto numerosas veces aguiluchos
laguneros comer de los gatos, etc. que yacen en la cuneta. Son menos
asustadizos que los milanos negros y, éstos últimos si la presa no es muy
grande, prefieren prenderla con sus garras sin dejar de volar para comérsela en un lugar apartado.
Suele ser más habitual en los jóvenes aguiluchos alimentarse de carroña dada su
escasa experiencia como cazadores. El oportunismo llama la atención de muchas
rapaces, donde el lagunero, haciendo gala de su irascibilidad, sabe hacerse
hueco para acceder a la carnaza extendiendo sus alas entre multitud de milanos
y algún ratonero. La enorme singladura de la rapaz de los humedales en busca de
alimento, le lleva incluso, hasta lugares esteparios donde no hay agua en kilómetros
a la redonda.
la serie fotográfica muestra la postura defensiva de la joven hembra de aguilucho lagunero sobre los restos de alimento. Defiende la carne del vuelo rasante de los milanos reales que, mostraré próximamente en la entrada siguiente.
Cuando se adquiere cierta experiencia en eso de espiar el carroñeo de los laguneros,las vivencias que se adquieren son bastante enriquecedoras y altamente adictivas,advertido quedas.No quiero decir con eso que vayas a abandonar tu hogar,familia y trabajo, para irte a vivir al monte como Jeremias Jhonson ni mucho menos, pero...yo ya me entiendo.
ResponderEliminarSi perseveras en tu afán de observar y fotografiar aves de hábitos carroñeros,pronto serás gratificado con un buen surtido de experiencias que te harán amar más a estos bichejos si cabe.
Espero que tengas suerte y puedas compartir con los que te seguimos,las numerosas vivencias que a buen seguro vas a disfrutar.
Fantásticas fotografías de una hermosa ave.
ResponderEliminarCerca de Barcelona en el Garraf hay algunas parejas de águila que en alguna ocasión hemos podido ver. Desgraciadamente no sabemos la especie a que pertenecen pero nos gusta poder contemplarlas.
Un brazo de tus amigos,
rails i ferradures.
La secuencia de fotos hablan por si mismas del comportamiento de este bello animal.
ResponderEliminarEspero con impaciencia ese nuevo reportaje sobre los milanos reales, así podré contemplar a estas aves que nunca vi al natural.
Buena serie, has onseguido que esta rapaz color capuchino (chocolate-crema) hay bajado a tu cebo.
ResponderEliminarQue bien se ve la agresividad de esta ave,: El busardo se atreve justo y los Milanos pues eso se amilanan.
Saludos camperos!
Lo que comentas de esta ave respecto a su interés por hábitats acuáticos y esteparios es curioso porque parecen difíciles de reconciliar, y buscando pequeños animales son bastante temerarios, a veces sobrevuelan un sembrado a dos metros (o menos) del suelo, algo espectacular y muy difícil observar en otras rapaces.
ResponderEliminarUn saludo
Magnífico reportaje de esta rapaz, que no he visto todavía.
ResponderEliminarSaludos
- Machosalvaje: tienes razón y, no te imaginas lo que me acuerdo de tus videos sobre el tema mencionado y la calidad de los mismos. Aquí apenas había unos cuantos milanos y un par de aguiluchos. De todos modos, todo lo que tenga que ver con las aves y el resto de especies tiene un interés muy especial para mí.
ResponderEliminarMuchas veces, si no fuera por dejar constancia de lo que veo para mostrarlo en el blog, preferiría observar a través del telescopio para dedicar toda la atención a las aves observadas.
Saludos.
- railsiferradures: esa es la magia de admirar la naturaleza y sus especies, que para lo que disfrutan de ellas, no les hace falta conocer sus nombres si no saber apreciarlas como algo bello y necesario.
Otro enorme abrazo para vosotros.
- Leodegundia: bellos animales que comen como limas. Hay que ver con lo vacío que están los campos de animales, el hambre que padecen.
Saludos.
- elcamperoinquieto: las fotos mediante cebas la verdad que suelen ser algo monótonas pero, son un complemento más para poder atraer rapaces y disfrutarlas de cerca. Creo que lo mejor es que tengan alimento en días tan complicados.
Saludos.
- Pedro L.: el de los aguiluchos es el comportamiento antagonista de caza, por ejemplo, de una de las modalidades del gavilán, que es la de ejecutar un vuelo acelerado para sorprender presas desprevenidas mientras los aguiluchos escrutan el terreno con una parsimonia fascinante pero, efectiva en sus súbitos y cortos picados.
Saludos.
- Pini: lo importante es que la veas en el momento más oportuno y con toda la tranquilidad de que dispongas, sin prisas.
Saludos.
Nunca tive o privilégio de assistir ao vivo uma cena destas tão estupenda evidenciada pela sua reportagem (escrita e visual) tão magnífica!!!!... Estou ansiosa para ver o destemido e ameaçador voo rasante dos milanos na próxima entrada.
ResponderEliminarAbraço...
Preciosas fotos, al verlas te imaginaba también a ti al acecho, para poder capturar estas imágenes tan bonitas
ResponderEliminarPor aquí lo que hay son buitres, alguna vez he llegado a tenerlos muy cerca, pero con el zum de mi cámara no pude hacer fotos buenas. Un saludo
Como bien comentas, donde campeo es zona esteparia, grandes superficies de cereales y alguna que otra laguna, es frecuente verlos por las llanuras en busca de alimento y cuando el sol aprieta, que aprieta mucho, se les ve campeando por los rastrojos y da peno verlos con los picos abiertos. Saludos desde Ecija.
ResponderEliminarMuy buena y didactica entrada, un abrazo.
ResponderEliminarEstupenda secuencia de un ave tan admirable.
ResponderEliminarUn abrazo.
- teca: pues lo siento pero, la rígida vigilancia de los milanos y su asustadizo comportamiento, me impidió realizar tan deseadas fotos. Me alegra que hayas disfrutado con el aguilucho.
ResponderEliminarUn abrazo…
- Pacasapena: bueno, yo estaba muy, muy oculto en el escondite tapizado de carrizo frente a una zona totalmente despejada. A cada movimiento, por leve que fuera, las rapaces emprendían el vuelo. Hay que pasar el rato sin apenas respirar.
Saludos.
- Pablo Reina: he visto tu lagunero y, es cierto, me ha dado la misma angustia que la gorriona de mi anterior entrada. Me gustan la fotografías capaces de plasmar el momento clave ahorradoras de exceso de comentario. Las imágenes lo dicen todo sobre el agobiante calor padecido. Sin embargo, el lagunero que ves comiendo, lo hacía con carne muy, muy jugosa y al lado de el río más caudaloso de este país, qué cosas…
- Ferlynx: gracias por tu interés.
Abrazos.
- Valverde: agradezco que te haya gustado.
Abrazos.
Hala, el otro también con el gato. ¿Qué más había rondando al gato muerto?
ResponderEliminarEs una rapaz preciosa que aqui por desgracia no contamos con muchas parejas.
ResponderEliminarMe gusta cómo abre las alas, me imagino que protegiendo e intimidando a sus competidores cercanos.
Veo que el gato dio para mucho
;)
un saludo amigo