
Este pájaro de plumaje discreto que os presento es bastante habitual en las zonas cercanas al agua. Lo veía muy a menudo sobre la vegetación palustre de la orilla del río Paraíba (RJ) Brasil como si fuera un carricero más, de hecho, es su hábitat preferido. El Garibaldi (no sé, por cierto, si tendrá alguna relación el nombre del pájaro con el héroe revolucionario Giuseppe Garibaldi) pertenece a la familia de los ictéridos, restringidos al Nuevo Mundo. Son aves pequeñas a medianas muy coloreadas; aunque en muchas especies predomina el negro mezclado frecuentemente con amarillo, naranja o rojo.

El macho luce un plumaje negro azulado, brillante, con píleo y babero castaño rojizos; la hembra es de un tono parduzco, discreto como el de otras tantas especies, apto para pasar desapercibida sobre el nido. El plumaje de los jóvenes también es de tono pardo, les sirve para mimetizarse los primeros días de vida cuando son más vulnerables a los predadores. La melodía aguda y gorjeante de su canto le hace destacar entre la vegetación lacustre donde alza su voz desde los puntos más elevados. Como es habitual en los pájaros de trino melodioso las frías jaulas de carceleros sin escrúpulos serán el futuro reducto de muchos de ellos.

Cría en pequeñas colonias y es la hembra la que construye el nido donde pone de tres a cuatro huevos que sólo ella incuba. Los pollos al nacer son alimentados por ambos progenitores hasta que abandonan el nido y se unen al grupo familiar.
El Garibaldi como el tico-tico (Zonotrichia capensis) sufren el parasitismo del tordo renegrido (Molothrus bonariensis). La hembra del tordo extrae un huevo del nido seleccionado para poner en su lugar el suyo que, incubarán las aves parasitadas sin advertir el cambio.
Se alimenta de insectos, larvas y también de semillas. Su visita en bandadas a los arrozales para alimentarse tanto de grano como de invertebrados genera malestar entre los campesinos, achacándoles éstos, un peso importante de sus pérdidas.
Se distribuye por Brasil, Argentina, Bolivia, Paraguay y Uruguay.




Postura típica de exhibición.