sábado, 18 de diciembre de 2010

Abubillas para siempre.



Siempre es un placer recibir la visita de la viajera abubilla (Upupa epops) al finalizar febrero, cuando regresa del continente africano, su cuartel de invernada. Es un ave de librea caprichosa y llamativa, sobre todo, por esa combinación de blanco y negro muy destacada en vuelo. Pasea coronada con una extravagante cresta, replegándola voluntariamente según su estado de ánimo. Su monótono canto, abunda durante las demarcaciones territoriales en primavera, anunciándose simultáneamente ante las selectivas hembras disponibles.
Es cierto que para disfrutar de estos momentos especiales hay que aguardar al periodo de celo entre marzo y abril. Pero, ya no hace falta esperar su regreso en los viajes prenupciales para verla. Su costumbre parcialmente migratoria parece ampliarse, y, no solamente permanece en el sur y zonas costeras de Levante, sino que se la ve con más asiduidad por regiones del interior ibérico durante el otoño e invierno. No son poblaciones residuales provenientes de Centroeuropa como erróneamente se pensaba. Estas pequeñas poblaciones que rehúsan cruzar el Estrecho para alcanzar sus cuarteles de invierno en una amplia franja del continente africano, consiguen a pesar de las inclemencias invernales, hallar el alimento disponible en la península sin aparente dificultad.
Las citas de este coraciforme en los anuarios ornitológicos aragoneses cada vez abarcan más espacio en sus páginas. Su presencia ya no resulta tan extraña. Durante el mes de noviembre y ahora en diciembre, he visto con frecuencia en áreas despejadas y agrícolas a siete kilómetros de Zaragoza, varios especimenes de abubilla. Este sábado, he tenido incluso, la fortuna de observar a doce ejemplares juntos mientras campeaban por el terreno yermo de una desaparecida plantación de chopos. Ver el vuelo ondulante de una abubilla encandila. Pero, observar el desplazamiento de doce de estas blanquinegras aves ejecutando toda suerte de acrobacias, lo supera. Sus alas agitándose, actúan como heliógrafos. Destellos por doquier.

Me preocupa que la irrupción de algún invierno crudo cargado de fuertes y pertinaces heladas, pueda sorprender a estas magníficas aves insectívoras en su nueva andadura. Como le ocurrió un ventoso y gélido invierno de 1985 a las avefrías (Vanellus vanellus), cuyos picos, no podían perforar el terreno endurecido por las heladas para acceder y capturar a los invertebrados de los que se alimentaban. Murieron miles de estas aves completamente desnutridas.

14 comentarios:

  1. ¡Hola Javier!
    Una bella pintura la del encabezamiento, que nos muestra en todo su explendor a esa abubilla fantástica de rayado blanquinegro, pico curvilíneo y esas tonalidades asalmonadas de la cabeza.
    Se ve que se encuentran bien por aquí y no quieren cruzar el estrecho hacia África, pues sería lástima que ese invierno crudo del que hablas las cogiera por sorpresa.
    Me alegro de que te hayan gustado los cuadros de Ando Hiroshige, debes de conocer muchas cosas de Japón teniendo una hija tan aficionada a lo relativo a ese avanzado y próspero país. Pienso que también debe haber tomado algo de esa afición innata tuya por la naturaleza. Un abrazo.

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  2. Javier, que pintura estupenda!

    Fiquei triste de saber que essa ave morre de fome se vier um inverno rigoroso... como poderá se alimentar então? Resta tentar sobreviver... ou ir sem ter o que comer... :(

    Quanto à postagem anterior, um relato espetacular, embora com fotografias um tanto quanto macabras... *.*

    Amigo, te desejo tudo de bom para você e os seus.
    FELIZ NATAL e que 2011 venha repleto de paz, amor, saúde e muitas realizações.

    Um beijo carinhoso desta que o admira e estima.

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  3. Hola Javier ! que estupendo el relato y la descripción de la abubilla. ¿sabes que no conocía a esta hermosa ave?
    Me dió mucha pena lo que pasó en ese invierno de 1985, pobrecillas!
    .............
    Javier: te deseo un feliz 2011 junto a tu familia y demás seres queridos.
    Ha sido un gran placer el haber conocido tu blog y tus sentimientos, a través de él, por la naturaleza.
    Un abrazo amigo y gracias por todo lo que nos enseñas.
    FELICIDADES PARA EL AÑO NUEVO !

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  4. La pintura es bellísima. Tu descripción sobre esa simpática ave me ha gustado mucho. Alegra los campos con sus vuelos y sus cantos. Y los corazones de los amantes de la naturaleza, que con tanta delicadeza expones,amigo Javier.

    Un abrazo,

    Luis.

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  5. Hola, Javier. Preciosa la abubilla que has hecho, ¿es una acuarela? Yo suelo pintar con lápices y rotuladores y, como soy autodidacta, pues nunca aprendí a pintar con óleos.
    Yo veo abubillas siempre en la muralla del castillo de mi pueblo, se conoce que les gusta ese sitio para anidar, a ver si esta primavera consigo volver a ver más, como esta pasada primavera. Siempre me han encantado estas aves, son unos animales la mar de encantadores.
    Es una pena lo de las avefrías, pero en fin... estas cosas pasan. Esperemos que, de todas maneras, no les pase nada malo a nuestras queridas upupas.
    Saludos,
    Guillermo

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  6. - Clariana: la frecuencia con la que se observa a la abubilla parece quitarle ese encanto especial de ave tropical. Personalmente, encuentro a esta curiosa ave como una de las más destacadas gracias a una formidable combinación de contrastes, y cómo no, por el largo pico y esa cresta desplegable tan original. La urraca, tan común en nuestros parques, también es digna de figurar como un pájaro atractivo de contraste blanco y negro con el punto añadido y destacable de las irisaciones azuladas en sus plumas alares y verdosas en la cola.
    Creo que mucha gente no mira detenidamente a las aves para contemplar la magnitud de su belleza.

    Abrazos.


    - Teca: afortunadamente, inviernos como el de 1985 no son habituales. Las cigüeñas comprensiblemente, aguantan en la península ahorrándose el viaje gracias al maná de los vertederos, compaginándolo con las presas de las riberas de ríos y linderos de los campos de cultivo. Para la abubilla, habría que analizar y estudiar la causa progresiva de su cambio como migradora a sedentaria. Se sospecha que el cambio climático parece estar detrás de casi todo. Cuando las temperaturas se suavizan, favorecen la actividad de los insectos; así, la alimentación se asegura.

    Te persiste la comilona en el post anterior. Había de todo: carne, marisco…el menú era variadísimo.
    Ciertamente, eran imágenes algo fuertes.

    Deseo que todos los mejores poemas que expones, sean fiel reflejo de felicidad en tus próximos años. Feliz año para ti y para los tuyos.

    Abrazos.


    - Mabel: pues es una pena que no hayas tenido la oportunidad de verla, aquí de momento es bastante común. Espero que lo sea por mucho tiempo. Anótalo para cuando te acerques de nuevo por aquí y te des un paseo por el campo.

    El placer también es mío. Te deseo de igual modo, un año rebosante de felicidad. También agradezco poder compartir puntos de vista contigo gracias al milagro de esta tecnología tan especial.

    Abrazos.


    - Luis G.: me imagino que, la abubilla, será fiel compañera de tus viajes montaraces y uno de los mejores adornos vivientes de todas las construcciones solitarias y en ruinas que con tanto detalle expresas mientras las contemplas.
    Gracias.

    Abrazos.


    - Guillermo: la abubilla está pintada con acuarela. La técnica es complicadísima y no la domino en absoluto. Me limito a mezclar los colores con agua y experimentar a ver lo que sale. Ser autodidacta es bueno, pero es mejor buscar una base entre los grandes pintores. Sobre todo, perseverancia en la práctica; insistir muchísimo. Yo por el contrario soy muy vago.
    Te dejo dos grandísimos pintores de este país como ejemplo. A mí me animan bastante.


    http://pinceladasdenaturaleza.blogspot.com/ Lluís Sogorb.

    http://arteinatura.blogspot.com/ Gonzalo Gil.

    El invierno de las avefrías fue algo bestial. Heladas que duraron semanas en un marco de sequía pertinaz que duró años. Los ochenta fueron años para no olvidar.
    Espero que no se repita aquella ola de vientos helados, sino las abubillas y muchas otras aves lo iban a pasar muy mal.

    Saludos.

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  7. Se estarán volviendo un poco perezosas en eso de viajar, yo si pudiera me iba a Africa ya que no aguanto el frío. Precioso dibujo!

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  8. En primer lugar, mis felicitaciones por el dibujo de la abubilla y el texto que lo acompaña
    En segundo, coincido contigo en que el cambio climático parece estar detrás de este asunto aunque también puede ayudar (y mucho) que las abubillas hayan encontrado nuevas maneras de ganarse la vida a costa de actividades humanas. Aunque venga algún año helador, probablemente la tendencia sea que la abubilla siga los pasos de las cigüeñas comunes.
    Saludos.

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  9. Nunca vi una abubilla pero es una ave que siempre estará en mi recuerdo por un cuento que me leyeron de niña y que desgraciadamente ya no lo tengo.
    El invierno es duro para todos pero los animales desgraciadamente se llevan la peor parte, espero que este año no sufran demasiado pues si el otoño vino como vino sabe Dios que nos deparará el invierno.
    Un abrazo

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  10. - Asterina: parece que teniendo alimento suficiente, para qué emprender un largo viaje generando un gasto energético absurdo, además de exponer la vida a un riesgo innecesario durante la migración. Que se queden.

    Saludos.


    - Creo Javier que, las cigüeñas tienen el apoyo de los vertederos donde encuentran un alto porcentaje de comida fácil. Pero la abubilla parece que continúa con su tradicional campeo en busca de su habitual alimentación de insectos. Un exhaustivo seguimiento nos sacaría de muchas dudas. Hay un dato, pienso que a tener en cuenta en el lugar de observación de los doce ejemplares de abubilla; me refiero, a la ganadería ovina de paso diario por la zona y, a un establo de caballos, donde el cúmulo de fiemo atrae a los insectos. Parece una interesante reserva de oportunidades.
    Está claro que los inviernos vienen algo revolucionados y que aun habiendo días fríos, no son lo suficiente como para aniquilar grandes cantidades de insectos, a los que se ve pulular con alegría cuando aparece un día soleado.
    Gracias Javier.

    Saludos.


    - Pues Abedugu, hazte a la idea de que ves un gran treparriscos blanquinegro. Sus vuelos son casi idénticos, además de fantásticos. Tienes que ir a verla ya, y me cuentas.
    Estos inviernos tienen días de mucho frío pero no parece que consigan por lo que sea, amedrentar a las aves que deciden quedarse. Hay que trabajar duro investigando con certeza las consecuencias de todo lo que está ocurriendo.

    Saludos.

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  11. Me gustaría felicitarte la Navidad, pero no tengo tu correo. ¿Me lo mandas?

    El mío: tawaki89@yahoo.es

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  12. Aprovecho Tawaki para felicitártelas desde aquí. Que tengas unas navidades tan paradisíacas como tus espectaculares viajes, llenos de entusiasmo e ilusión.

    Saludos.

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  13. Ya sea posada o en vuelo, es un ave de belleza sencilla y singular. Como lo es tu acuarela.
    Saludos
    Lluís

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  14. Si, el ave es preciosa, la acuarela pasable. Y mira que te presto atención.

    Saludos.

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