Los pajares del Villar
Esperando la hora de enganchar
Los buitres leonados en las mañanas de buen sol, aparte de la necesidad del baño solar, se reúnen quizá para deliberar sobre el tema de las carroñas "la cosa pinta mal" parecen pensar. Esta claro, que no hay mejor lugar para pedir que en la casa de Dios.
Esperando la hora de enganchar
Los buitres leonados en las mañanas de buen sol, aparte de la necesidad del baño solar, se reúnen quizá para deliberar sobre el tema de las carroñas "la cosa pinta mal" parecen pensar. Esta claro, que no hay mejor lugar para pedir que en la casa de Dios.
Qué pasada de foto. Míralos allí qué puestos. Jaja, me encanta.
ResponderEliminarYo ya he vuelto de la Sierra de la Culebra, increíblemente relajada y cada vez amando más la naturaleza.
Nada, no hubo suerte, Canis lupus no se dejó ver. Habría sido demasiado ya, pero he venido encantada.
Saludos!!
Curiosa reunión de frailes que rezan sus "maitines" antes de irse a trabajar, ante la atenta mirada de el abad en lo alto del púlpito campanario.
ResponderEliminarHola Mamen!He estado trabajando en el pueblo y ahora me pongo al día.
ResponderEliminarMe alegro de esa fuerza interior que se llama ilusión, que te acompañó en el viaje y que a pesar de la mala fortuna con el lobo, siempre se recarga de nuevo para otra próxima aventura; pues hay todavía, mucho mundo esperando.
¡Alegría!
Que tal Jesús? La verdad es que hay un muladar cerca y el tejado de la ermita les sirve de oteadero. En días normales, muchos se acercan a recibir los primeros rayos del sol.
Ahah... me encanta esta entrada tão sugestiva e alegre!
ResponderEliminarUmas ótimas fotografias que com o aumento certamente seriam mais bem vistas...
Um beijo
Una estampa habitual en los días tranquilos de esta zona de pajares junto a la ermita, donde se separaba el grano de la paja con el uso de trillos tirados por mulos en áreas despejadas.
EliminarBesos...